Con la participación de casi mil dirigentes bonaerenses, pertenecientes tanto al Frente Renovador (FR) como a "Unidos por una Nueva Alternativa" (UNA), ayer comenzó el "Congreso de la Provincia de Buenos Aires" en el NH Gran Hotel Provincial.
Mientras que los dirigentes más rezagados todavía completaban el trámite para acreditarse, el salón de las Américas se mostraba colmado de diputados -nacionales y provinciales-, senadores, consejeros escolares y militantes del Frente Renovador que se dieron citar ayer en el NH Provincial para ser parte “Congreso de la Provincia de Buenos Aires”.
“Estamos muy contentos por la convocatoria y porque el encuentro es muy importante, tanto a nivel político como para conocernos todos”, celebró el concejal Lucas Fiorini que ofició de anfitrión, junto a sus compañeros de bancada Cristian Azcona y Alejandro Carrancio.
“Es muy importante este encuentro, no sólo por la estrategia política que puede surgir sino porque estamos todos juntos, somos muchos dirigentes que vinimos para trabajar en pos del futuro”, coincidió el diputado provincial Javier Faroni, mientras se instalaba en la primera fila junto a su compañero de bancada Daniel Arroyo; los diputados nacionales Graciela Camaño y José Ignacio de Mendiguren y los senadores provinciales Patricio Hogan y Gabriel Pampín y el intendente de General Alvarado, Germán Di Cesare, entre otros. También estuvo presente la secretaria general de los gastronómicos locales, Mercedes Morro.
Las apertura estuvo a cargo del dirigente Julio Bárbaro y del intendente de Junín, Mario Meoni, que celebró el encuentro “con dirigentes valientes y con coraje, que durante la elección pasada se bancaron desde campañas hasta operaciones, pero nunca aflojaron”.
En referencia al resultado electoral del año pasado, consideró que “hicimos una gran elección, por eso tenemos esta representación legislativa que se junta para debatir qué haremos en el futuro”.
Respeto
El jefe comunal de Junín, radical de origen, no perdió la oportunidad de “darle un palito” a los organizadores porque “hablan de organización social, unidad básica o iglesia pero se olvidan de los comités, de dónde salí” aunque recalcó que en el actual espacio politico que integra “el debate no termina en el café, que era lo que me pasaba en el radicalismo”.
Luego del aplauso de los presentes, Meoni aprovechó para “repudiar” el episodio de violencia verbal que había sufrido el presidente Mauricio Macri unas horas antes en un acto n la ciudad. “Hay que cerrar brechas -destacó- y para eso se necesita respeto”.
Sobre el escenario, Julio Bárbaro liberó su sentido del humor: “Soy un hombre de suerte -definió- vine con (José) de Mendiguren que manejaba y guiaba (Aldo) Pignanelli y llegamos”. Así se ganó el primer aplauso y las carcajadas de la jornada, aunque también repudió los actos violentos porque aseguró que quiere “la unidad en la diversidad”.
En su diatriba, recordó que “fui uno de los últimos en hablar con (Juan) Perón y no éramos un grupito partidario más, éramos portadores de la convivencia nacional. Eso me llevó a diferenciarme con el peronismo, porque buscaban en el marxismo con (Carlos) Kunkel, (Diana) Conti o (Carlos) Heller lo que el peronismo tiene de sobra. El peronismo vende la producción, no la estructura productiva, y eso me diferencia aún más de (Mauricio) Macri”.
A lo largo de la tarde, se sucedieron los talleres y charlas que alternaron con el “coffe break” que los nucleaba en pequeños grupos en el Salón de las Columnas, mientras aguardaban la llegada del líder, Sergio Massa.